miércoles, 13 de mayo de 2009

El cierre de "Off"

Parece que el cierre de la Sala Off se convierte en definitivo, según informa hoy la prensa valenciana. Otra sala de teatro con problemas, otra sala que cae. Y no es la única que andaba en la cuerda floja. Está Carme, con su cruz en stand bye, y hay alguna más metida en pleitos que, de momento, es mejor no remover. ¡Cómo está el teatro! Cada vez se habla más de él. Pues sí. Pero con frecuencia las noticias no son esperanzadoras sino todo lo contrario. Licencias que no se conceden porque las salas carecen de las condiciones exigidas, permisos que tampoco porque las salas incumplen normativas, quejas y denuncias de vecinos por el ruido a las nueve de la noche. Qué triste. Todas las noches del año en que no llueve y la mitad de las que llueve tengo que soportar hasta bien entrada la madrugada (esto es, la una, las dos, las tres y a veces las cuatro) los gritos y cánticos de los que han tomado la calle para sus juergas nocturnas con la absoluta pasividad de la policía municipal. Claro, los juerguistas no necesitan licencia ni permiso para sus representaciones. Nadie les cierra. Nadie les echa. No existen. Como el teatro pobre. A este paso directores y gestores acabarán apostados en la calle, aprovechando parques, recodos, cubiertas y hasta cajeros de la obra social de nuestras cajas de ahorro para estrenar sus montajes.